El marqués y el sodomita

El idilio entre Oscar Wilde y lord Alfred Douglas, alias «Bosie», figura con letras de oro en los anales del desorden amatorio. En 1895, el marqués de Queensberry, padre de Bosie, envió al club Albemarle una nota dirigida al «somdomita»[sic] Oscar Wilde. El aludido decidió entonces, y con el aliento de su joven galán, demandar por la «calumnia» al enojado aristócrata y restaurar así el honor que éste había públicamente mancillado: de tan mísero modo estalló el mayor escándalo de la época y se selló la no menos miserable suerte del dramaturgo, que perdería el juicio y...