La buena nueva de los Libros del Caminante

Artefacto verbal inteligentísimo, gozoso, centrífugo, La buena nueva... rastrea la huella de ese caminante a través de un vagabundeo que es, al mismo tiempo, retrato hablado: un centro inasible, rodeado de brío y fascinación, que se lee a sí mismo en busca del autor.
