¡Qué bello será vivir sin cultura!
El mundo digital, las nuevas tecnologías y las redes sociales están transformando nuestra vida cotidiana, y estos cambios se reflejan en áreas tan importantes como el trabajo, la enseñanza, las relaciones sociales o la economía. Cada vez vivimos más conectados, lo que provoca que nos sintamos atados y vigilados y que el deseo de consumir algoritmos aumente, mermando nuestro poder de decisión y nuestro espíritu crítico. Al mismo tiempo, somos adictos a esta tecnología y sentimos angustia y confusión cuando nos desconectamos del continuo torrente de estímulos e información que...