Muertes regias. Cómo murieron los reyes de España
Uno se imagina los últimos momentos de los monarcas envueltos en la misma pompa y circunstancia que los rodearon en vida, sin perder un ápice de su majestad en el trance definitivo. Con serenidad, solemnidad y en silencio. Pero las excepciones a ese lienzo ritual y ceremonioso no son pocas. Están, de un lado, los que murieron en el campo de batalla, como el aragonés Pedro II, que falleció combatiendo a los cruzados de Simón de Monfort en Muret (1213), mientras defendía a sus súbditos de Occitania. Y son mucho más abundantes los que perdieron la vida en circunstancias extrañas o...