Nellie Campobello, nacida el 7 de febrero de 1900 en la ciudad de Chihuahua, México, fue una destacada escritora y poeta mexicana, ampliamente reconocida por su obra literaria que refleja las vivencias y la realidad del contexto social y político de su tiempo. Su nombre real era María de los Ángeles Campobello, y es considerada una de las figuras más importantes de la literatura mexicana del siglo XX, especialmente por su contribución a la narrativa sobre la Revolución Mexicana.
Creció en un ambiente marcado por el conflicto y la transformación social, lo que influyó profundamente en su obra. A lo largo de su vida, Campobello se dedicó a plasmar en sus escritos las experiencias de las mujeres y los niños que vivieron la Revolución, ofreciendo una perspectiva única y valiosa que contrasta con la narrativa dominante de los historiadores y los líderes revolucionarios masculinos.
Una de sus obras más emblemáticas es Cartucho, publicada en 1931. Este libro es una recopilación de relatos cortos que retratan la vida en tiempos de guerra, centrándose en la experiencia de quienes sufrieron las consecuencias del conflicto. A través de su prosa poética, Campobello logra capturar la esencia del dolor, la pérdida y la resistencia de la población civil. Su estilo se caracteriza por una mezcla de crónica y ficción, lo que permite al lector sumergirse en la realidad de su tiempo. Cartucho es considerado un texto fundamental para entender la literatura mexicana y, en particular, la representación de la Revolución desde la perspectiva femenina.
A lo largo de su carrera, Campobello también escribió Las manos de Dios y El último sueño, obras que continúan explorando temas de amor, guerra y la búsqueda de la identidad. Su producción literaria no sólo se limita a la prosa, sino que también abarca la poesía, contribuyendo de manera significativa a la literatura en español.
En adición a su labor como escritora, Nellie Campobello fue una activa promotora de la educación y la cultura. Se desempeñó como maestra y trabajó en diversas instituciones educativas, abogando por el acceso a la educación para todos, en especial para las mujeres. Su compromiso con la enseñanza y su pasión por la literatura la llevaron a ser una figura influyente en el ámbito cultural de México.
A lo largo de su vida, Campobello recibió diversos reconocimientos por su obra literaria y su contribución a la cultura mexicana. Sin embargo, su legado no siempre recibió la atención que merecía durante su vida y, a menudo, fue eclipsado por la producción de escritores masculinos contemporáneos. En años recientes, ha habido un resurgimiento del interés por su obra, y su legado ha comenzado a ser reconocido como parte integral de la historia literaria de México.
Nellie Campobello falleció el 6 de enero de 1986, pero su voz y su mensaje continúan resonando en la literatura contemporánea. Su habilidad para capturar la esencia de la experiencia humana en tiempos de adversidad, así como su representación de las mujeres en la Revolución Mexicana, garantizan que su obra siga siendo relevante y estudiada hoy en día.
En resumen, la vida y obra de Nellie Campobello representan una rica contribución a la literatura y la cultura de México. Su capacidad para narrar las realidades de su tiempo y su compromiso con la educación han dejado una huella indeleble en la historia literaria, convirtiéndola en una figura insustituible en el estudio de la literatura mexicana.