Ernesto "Che" Guevara nació el 14 de junio de 1928 en Rosario, Argentina. Desde una edad temprana, Guevara mostró interés por la medicina, la literatura y la política. Estudió medicina en la Universidad de Buenos Aires, donde se graduó en 1953. Durante sus años universitarios, Guevara se vio influenciado por la situación política y social de América Latina, así como por su creciente interés en las ideologías marxistas.
En 1951, Guevara emprendió un viaje por América Latina en motocicleta con su amigo Alberto Granado. Este viaje fue revelador para él, ya que le permitió observar las desigualdades y el sufrimiento de las poblaciones en diversos países, lo que cimentó su convicción de que era necesario un cambio radical en la sociedad. Su experiencia en Guatemala en 1954, donde apoyó al gobierno de Jacobo Árbenz, lo llevó a entender la profunda influencia que Estados Unidos ejercía sobre los gobiernos latinoamericanos.
En 1955, mientras se encontraba en México, Guevara conoció a Fidel Castro y a otros miembros del movimiento revolucionario. Se unió al Movimiento 26 de Julio, que buscaba derrocar al régimen de Fulgencio Batista en Cuba. Guevara participó activamente en la Revolución Cubana, desempeñándose como médico y comandante. Su liderazgo y habilidades tácticas fueron fundamentales en la victoria del movimiento revolucionario, que culminó en 1959.
Una vez establecido el nuevo gobierno en Cuba, Guevara ocupó varios cargos importantes. Fue nombrado Ministro de Industria y participó en la creación de una nueva economía socialista en la isla. Durante su mandato, promovió la reforma agraria y la nacionalización de industrias, así como la alfabetización y la atención médica para todos los cubanos. Guevara también fue un ferviente defensor del internacionalismo, creyendo en la necesidad de extender la revolución a otros países en América Latina y más allá.
En 1965, Guevara dejó Cuba para llevar su misión revolucionaria a África, específicamente a la República del Congo, donde intentó fomentar un levantamiento. Sin embargo, su experiencia allí fue difícil y no tuvo éxito. Luego, en 1966, se trasladó a Bolivia con el objetivo de iniciar una revolución allí. Guevara buscaba crear un foco guerrillero en los Andes, pero la situación se complicó rápidamente debido a la falta de apoyo local y a las estrategias contrarrevolucionarias del gobierno boliviano.
El 8 de octubre de 1967, Guevara fue capturado por el ejército boliviano con la ayuda de la CIA. Al día siguiente, fue ejecutado en La Higuera, un hecho que conmocionó al mundo y convirtió a Guevara en un símbolo de la lucha revolucionaria. Su imagen, en particular la famosa fotografía de Alberto Korda, se ha convertido en un ícono cultural asociado con la resistencia y la rebeldía.
Las ideas y el legado de Che Guevara han perdurado a lo largo del tiempo. Se le recuerda no solo por su papel en la Revolución Cubana sino también por su pensamiento crítico sobre el capitalismo, el imperialismo y la injusticia social. Su libro más famoso, "El Guerrillero Heroico", así como "La Guerra de Guerrillas", son textos esenciales que han influido en numerosos movimientos revolucionarios en todo el mundo.
Hoy en día, la figura de Guevara es objeto de controversia. Para algunos, es un héroe y un mártir de la lucha por la justicia social; para otros, es visto como un ideólogo violento cuya estrategia de lucha armada tuvo consecuencias devastadoras. Sin embargo, lo innegable es que su vida y su legado siguen siendo un profundo y apasionante tema de discusión en la política y la cultura contemporáneas.
En resumen, el Che Guevara simboliza un periodo de intensa lucha política y social en América Latina. Su pasión por la justicia y su deseo de cambiar el mundo lo llevaron a convertirse en un ícono duradero del pensamiento revolucionario, inspirando a generaciones de activistas y revolucionarios en su búsqueda de un mundo más justo.