Francisco Umbral

Anna Caballé es una escritora y académica española, cuyo trabajo abarca tanto la creación literaria como la investigación y el estudio de la literatura. Nació en Barcelona en 1958 y desde una edad temprana mostró un interés profundo por la literatura, lo que la llevó a seguir una carrera en este ámbito. Su formación académica incluye estudios en Filología Hispánica y Literatura Comparada, campos en los cuales se ha especializado a lo largo de su trayectoria.

Caballé ha trabajado como profesora universitaria, donde ha compartido su pasión por la literatura con sus estudiantes. Su labor docente ha sido fundamental para el desarrollo de nuevas generaciones de lectores y escritores. Además, ha participado en diversas conferencias y seminarios, contribuyendo al diálogo sobre la literatura contemporánea y su evolución.

Como autora, Anna Caballé ha escrito tanto ensayos como novelas. Sus obras suelen explorar temas relacionados con la identidad, la memoria y las relaciones humanas, reflejando una sensibilidad particular hacia las experiencias individuales y colectivas. A través de su prosa, busca conectar con los lectores, invitándolos a reflexionar sobre su propia existencia y el mundo que los rodea.

Uno de sus libros más destacados es “La escritura infinita”, donde analiza la relación entre el acto de escribir y el proceso de creación literaria. Este ensayo ha sido bien recibido tanto por la crítica como por el público, consolidando su posición como una voz relevante en el ámbito literario español. Su estilo es accesible y, al mismo tiempo, profundo, lo que le permite llegar a un amplio espectro de lectores.

Además de su labor como escritora, Anna Caballé ha sido editora y ha colaborado con diversas revistas literarias, donde ha publicado artículos y relatos que han enriquecido la cultura literaria. Su compromiso con la promoción de la literatura también se manifiesta en su participación en talleres de escritura, donde ha guiado a aspirantes a escritores en la exploración de su creatividad.

A lo largo de su carrera, ha recibido varios premios y reconocimientos que destacan su contribución a la literatura española. Estos galardones no solo subrayan la calidad de su obra, sino que también reflejan su influencia en el panorama literario actual.

En resumen, Anna Caballé es una escritora multifacética que ha dejado una huella significativa en el mundo de la literatura. Su capacidad para abordar temas complejos con una prosa clara y envolvente la convierte en una figura destacada en el ámbito literario español. A través de su trabajo, continúa inspirando a lectores y escritores, consolidándose como una voz importante en la narrativa contemporánea.

El dinero (1891) es una novela donde Émile Zola toma hace una crítica mordaz del capitalismo y las altas finanzas, sobre el funcionamiento de la banca y de los mercados de capitales. Inspirada en un hecho real: la quiebra de un famoso banco, la novela relata las vidas de una serie de personajes, sus ambiciones, sus pasiones, sus amores y sus problemas. Pasiones individuales y de grupos: los conservadores católicos contra el capital judío, el papel de la masonería y, en el medio, historias familiares, ruinas, adulterios y sobornos.

Autobiografía de Henry Ford, fundador de la Ford Motor Company y pionero de la producción en cadena.

Le gustaba que le dijeran Hank, pero en sus prosas, la mayoría autobiográficas, se llamaba Henry Chinaski. Antes de ser novelista, fue cuentista, autor de crónicas periodísticas y un notable poeta. Inclasificable estilísticamente, no sólo resulta el último escritor maldito de la literatura norteamericana, sino también el único decididamente conforme con ese estigma. Cínico, humorístico, siempre lúcido y perdedor, Bulowski fue un obrero de la palabra que recién a los cuarenta años pudo iniciar su carrera de escritor. Publicó cuarenta y cinco libros. Hasta entonces, había...

Se trata de una novela histórica basada en la apasionante biografía del Capitán de mar que descubrió el paso entre los océanos Atlántico y Ártico. Tras la desaparición del descubridor, la pista del ansiado estrecho quedó olvidada en los archivos reales hasta que Alejandro Malaspina recibió el encargo, de parte del rey de España, de localizar el famoso paso antes de que lo hicieran los ingleses o franceses, pero no consiguió encontrarlo. No fue hasta 1905, cuando el noruego Road Admunsen encontró de nuevo la entrada del Paso del Noroeste mientras buscaba el esquivo Polo Norte...