Marie-Jean-Antoine-Nicolas de Caritat, mejor conocido como Marquis de Condorcet, fue un filósofo, matemático y político francés del siglo XVIII, nacido el 17 de septiembre de 1743 en Ribemont, Francia. Su vida y obra se enmarcan dentro del contexto de la Ilustración, un periodo caracterizado por el florecimiento del pensamiento racional y por el cuestionamiento de las instituciones tradicionales, especialmente la monarquía y la iglesia.
Condorcet provenía de una familia noble, lo que le permitió acceder a una educación privilegiada. Desde joven mostró un interés notable por las matemáticas y las ciencias, campos en los que se destacó. En 1769, fue elegido miembro de la Academia Francesa de Ciencias, lo que le proporcionó un espacio para desarrollar sus ideas y colaborar con otros pensadores de su tiempo.
Uno de los principales aportes de Condorcet fue su trabajo en el ámbito de la teoría de la probabilidad y su desarrollo de métodos estadísticos. Entre sus contribuciones más notables se encuentra el teorema de Condorcet, el cual proporciona fundamentos para la toma de decisiones en situaciones de votación, y que sigue siendo relevante en la teoría de decisiones hoy en día.
Además de su trabajo matemático, Condorcet fue un ferviente defensor de los derechos humanos y de la educación. A lo largo de su vida, abogó por la igualdad de derechos para todos, sin distinción de género o condición social. En 1792, publicó su famoso “Esquisse d'un tableau historique des progrès de l'esprit humain”, en el que esboza una visión optimista del desarrollo humano y postula que el progreso de la humanidad es posible a través de la razón y la educación.
Condorcet también fue un defensor del sufragio universal y de la abolición de la esclavitud. En un periodo en el que la Revolución Francesa estaba en pleno apogeo, sus ideas sobre la democracia y la igualdad se volvieron cada vez más influyentes, aunque también le generaron enemigos. Por su oposición a la radicalización del movimiento revolucionario, se convirtió en un blanco de la persecución política.
En 1793, Condorcet fue denunciado como un enemigo de la Revolución y se vio obligado a huir. Pasó los últimos años de su vida en la clandestinidad. A pesar de las circunstancias difíciles, continuó escribiendo y promoviendo sus ideas hasta su muerte. Fue encontrado muerto el 28 de marzo de 1794 en una pensión en París, aparentemente por causas naturales, aunque algunos han especulado que pudo haber sido asesinado.
La figura de Condorcet ha resurgido en el siglo XX y XXI, siendo reconocido no solo como un pionero de la matemática moderna, sino también como un defensor de los derechos humanos y la educación. Su legado continúa inspirando a pensadores, activistas y defensores de la justicia social alrededor del mundo.
En resumen, el Marquis de Condorcet fue un polifacético pensador cuya vida estuvo dedicada al avance del conocimiento y los derechos humanos. Su influencia perdura en la actualidad, haciendo de él una figura central en la historia de la Ilustración y en el desarrollo del pensamiento democrático.